No te detengas nunca
“No te detengas nunca y no dejes de marchar cuando no hay camino, deja que tus pies vayan abriendo el camino. No mires atrás cuando se haya hecho de noche, ilumina tu caminar con la luz que hay en ti mismo. Porque la oscuridad más terrible no es la que te rodea, sino la que te habita. Y la luz más bella no es la que te ilumina desde afuera, sino la que se asoma en tus ojos, desde adentro”